En los últimos años, el número de personas que emprendieron viajes peligrosos por mar, por tierra o a través las fronteras en busca de protección u oportunidades de una vida mejor aumentó de forma exponencial. En gran medida, esos viajes se volvieron más peligrosos a causa de las políticas de migración y las prácticas de control de fronteras que limitan su acceso a la protección. De ahí que también aumentaran los riesgos que enfrentan dichas personas, así como los episodios de xenofobia, discriminación, exclusión y violencia. Todo eso contribuye a acrecentar la vulnerabilidad de las personas que migran, a sus familias y, eventualmente, las comunidades de acogida.
Las medidas para impedir la migración irregular podrían poner en peligro la protección y seguridad de muchos migrantes vulnerables y, algunas veces, causar incluso su muerte. La Cruz Roja y la Media Luna Roja llaman a todos los gobiernos a poner fin a la actual criminalización de los migrantes y modificar todas aquellas prácticas y políticas que anteponen la protección de las fronteras a la protección de la vida de los migrantes. La Cruz Roja y la Media Luna Roja también llaman a dejar de calificar a los migrantes de "ilegales".
Las migrantes tienen los mismos derechos humanos y el mismo derecho a protección que cualquier otra persona, su vida no vale menos y todos sus derechos deben respetarse.
Suma tu voz a nuestro llamado colectivo en
www.ifrc.org/protecthumanity y contribuye a universalizar la responsabilidad de proteger la humanidad (#ProtegerlaHumanidad) porque la vida de las personas migrantes no vale menos.