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José Fernando es joven aún, tiene 39 años, y ya ha dedicado una tercera parte de su vida a Cruz Roja como voluntario de distintos programas. Primero ayudando en proyectos infantiles, más tarde con personas mayores.
Su vinculación a Cruz Roja se produjo tras el vuelco que dio a su vida un grave accidente de tráfico que sufrió hace 13 años. Pese a las secuelas, José Fernando asegura seguir siendo "tanto o más activo que antes" y se muestra convencido de que "Cruz Roja me ha dado confianza en mí mismo, fe e ilusión".
Son infinitas las reflexiones que José Fernando expone sobre cómo con su aportación a Cruz Roja cree haber generado un mundo más solidario. "Desde que llegué a Cruz Roja he aprendido que el mundo no lo mueve el dinero, sino la humanidad de la gente, algo que encontré aquí", dice convencido asintiendo con la cabeza.
Y añade "he aprendido en Cruz Roja y en la vida todo aquello que no aprendí en el cole. He aprendido que con esfuerzo, honestidad, educación y una buena sonrisa se te abren todas las puertas".
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