Ramón Verde Jiménez
Cruz Roja Española en Toledo
(Toledo)

Soy Ramón Verde y tengo 25 años. Vivo en Toledo (en Castilla ¿ La Mancha), donde soy voluntario de Cruz Roja Juventud. En la asociación juvenil de Cruz Roja colaboro en una ludoteca, un espacio de encuentro, relación, participación y cooperación en el que los voluntarios, a través del juego, los juguetes y material lúdico, desarrollan en el niño una educación integral, activa y creativa, respetando la individualidad y favoreciendo la socialización. En este proyecto desarrollamos talleres de educación para la salud, de educación medioambiental y cooperación para la paz, talleres de reciclaje, juegos de confianza, interculturales, teatro, concursos y excursiones.

Además participo en el Club de Sensibilización y Educación para el Desarrollo. Esta iniciativa, que comenzó en el 2004, tiene como objetivo fomentar un sistema educativo no formal que nos permita sensibilizar y a la vez educar, desarticulando prejuicios, defendiendo los Derechos Humanos, el medio ambiente e impulsando el desarrollo humano en las relaciones Norte-Sur, con participación directa de jóvenes de la comunidad de Castilla-La Mancha y jóvenes de países en desarrollo.

Me hice voluntario porque unos amigos que entraron a Cruz Roja me contaron sus experiencias y decidí hacerme voluntario yo también. Cruz Roja es la institución que más me gusta, me gustan sus principios. Para mi es ¿LA ONG¿. Conocí a la institución gracias a su presencia en la calle, por la prensa, por su actuación en casos de desastres internacionales y en campañas de lucha contra el VIH/SIDA.

Llevo 3 años en Cruz Roja, y desde entonces lo que más me satisface es saber que con un poco de esfuerzo hay cosas que puedes cambiar, haciendo más fácil la vida de las personas más desfavorecidas.

Ser voluntario me aporta muchas cosas, entre otras me hace sentir bien, es una forma de darle utilidad a mi tiempo libre de forma productiva. Puedes conocer a mucha gente, conocer la realidad social que te rodea y también la más lejana. Continuamente puedes recibir formación que te permite tener más conocimientos para desarrollar de manera más efectiva tu labor voluntaria. Y además formas parte del grupo de personas que componen una ONG a nivel mundial.

No sé decir una experiencia que recuerde especialmente, son muchas actividades. En la ludoteca hay un montón de anécdotas que pasan casi a diario. Los encuentros entre voluntarios están muy bien, también las escuelas de verano, las campañas realizadas en la calle o celebraciones (Campañas contra el VIH/SIDA, Día Mundial de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, Campaña de alimentos¿).