Así se desprende de un Informe elaborado por la Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, en el que se apunta el gran avance que se está registrando en el ámbito de la reconstrucción, ya que a finales de 2009 se espera haber ejecutado cerca del 90 por ciento de los fondos recibidos.

Cruz Roja Española, que ha invertido ya más del 70 por ciento de los fondos, seguirá trabajando con los damnificados al menos dos años más. "A partir de ahora, nos centramos en proyectos de desarrollo económico y comunitario, diversificando sus fuentes de ingresos, mejorando sus capacidades productivas y fortaleciendo su seguridad alimentaria", indica Rubén Cano, responsable de Europa y Asia en Cruz Roja Española.

El objetivo de la intervención de Cruz Roja es lograr el desarrollo sostenible de las comunidades afectadas, mejorando también sus capacidades y su preparación ante desastres en previsión de futuros peligros como catástrofes, efectos del cambio climático, brotes de enfermedades y conflictos armados o el rápido aumento del precio de los alimentos y del combustible.

"No hablamos sólo de proyectos económicos o de construcción de viviendas e infraestructuras; es fundamental construir comunidades, lo que implica trabajar de forma integral, llevando a cabo programas de reconstrucción, dotación de agua potable y saneamiento, servicios de salud, generación de ingresos y otras intervenciones necesarias para lograr el desarrollo integral de las comunidades", según indica Cano.

Para llevar a cabo estos proyectos, Cruz Roja Española cuenta actualmente con más de veinte delegados de cooperación, que trabajan estrechamente con la Cruz Roja y la Media Luna Roja de los países más afectados