La XXX Conferencia Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja concluye con el compromiso de unos 1.500 representantes del Movimiento Internacional de la CR y MLR y los Estados Partes en el Convenios de Ginebra de reforzar la colaboración en la acción humanitaria. Los delegados convinieron en que hace falta la acción conjunta para hacer frente a las consecuencias humanitarias de los cuatro retos porqué cada uno de ellos sobrepasa la capacidad de un solo Estado o de una sola organización para afrontarlo.
Deterioro medioambiental y cambio climático. Se ampliarán la acción comunitaria y las medidas de preparación en previsión de desastres y reducción del riesgo para poder proteger mejor a las personas más vulnerables de las consecuencias de desastres cada vez más frecuentes y más graves, así como de los resultados del deterioro medioambiental y del cambio climático.
Migración internacional. En los países de origen, tránsito y destino, la prioridad esencial para el Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja seguirá siendo asistir a las personas vulnerables a causa de la migración, la trata y la explotación en particular, cualquiera que sea su condición jurídica. Este compromiso abarca la ayuda material y la sensibilización para combatir la discriminación de migrantes y promover el respeto de la dignidad humana.
Violencia, particularmente en contextos urbanos. El papel de los Estados es central en la protección y la asistencia a poblaciones expuestas a la violencia pero todas las partes acordaron en que es esencial aunar esfuerzos globales y basados en la comunidad para prevenir, desactivar y mitigar la violencia, y en particular, para asistir a los jóvenes afectados por ella.
Enfermedades emergentes, enfermedades recurrentes y otros problemas de salud pública. La creciente amenaza del VIH/SIDA, la tuberculosis y la malaria, entre otros problemas de salud pública, ha de neutralizarse mediante el fortalecimiento de los sistemas de salud y el establecimiento de planes nacionales de salud, principalmente a escala comunitaria donde la acción preventiva y asistencial de los voluntarios de la Cruz Roja es más efectiva.
Organizada bajo el lema Juntos por la humanidad en esta reunión de cinco días también se adoptaron varias resoluciones. En la primera se entiende aclarar la relación peculiar entre Sociedades Nacionales y gobiernos. Éstas actúan en calidad de auxiliares oficiales de las autoridades públicas en el campo de la acción humanitaria, lo que incluye: difusión del Derecho Internacional Humanitario (DIH); preparación en previsión de desastres; socorro en casos de desastre, salud y asistencia. En la resolución se declara que esa función no se extiende a todas las actividades de una Sociedad Nacional que deben ser libres de cumplir su mandato y tienen derecho a rechazar toda acción que contradiga los Principios fundamentales del Movimiento. En la segunda resolución, relativa al DIH, se reafirma, entre otros, la continuidad y aplicación de las garantías fundamentales de protección de la persona, independientemente de su condición, tanto en conflictos armados internacionales como no internacionales.
