Acila: “Sueño con una casa, más o menos bonita, pero que sea segura”

Acila Ibabao, de 79 años, construyó su pequeña casa de bambú con ayuda de sus vecinos en la pequeña aldea de Alaminos, en Aklan, pero el tifón Yolanda/Haiyan la derribó. Ahora reconstruye una vivienda segura con la ayuda de Cruz Roja, y gracias a la solidaridad de personas en todo el mundo.

Geraldine: Una casa al pie de la carretera.

Las carreteras que recorren la provincia de Aklan, en los márgenes del río con el mismo nombre están salpicada de tejados rojos de zinc. Son las casas levantadas por Cruz Roja. En el último año 2015, el número de tejados se ha multiplicado (ya se han levantado 1.150 casas) de manera que cada pocos cientos de metros, aparecen como un fogonazo rojo entre el verde de la vegetación.

Entre los tejados, reconocemos uno: el de la vivienda de la familia Francisco, a la que visitamos el pasado año. La casa está sobre una ladera y tiene una estupenda panorámica sobre un valle de cultivos de arroz. Geraldine Relado Fancisco, la madre de una familia de seis hijos, que perdió su casa en lo alto de la montaña debido al “bagio” Yolanda (la palabra en tagalo para tifón). En su caso, no hubo nada que reparar y Cruz Roja levantó para ellos una nueva vivienda hecha de madera, bambú y tejados de zinc pintados de rojo.

La vivienda de la familia Francisco permanece tan firme como hace un año, aunque ha recibido ciertas mejoras. Cruz Roja ha construido una letrina en un lateral, con la que también se promociona la correcta salubridad a los beneficiarios. Además, la familia ha recibido ayudas económicas para mejoras en el entorno de la casa.

Familia Nadine: Una intervención integral.

A sus 17 años, Shanderlyn Nadate, terminó sus estudios en el instituto de Madalag en la provincia de Aklan, y comenzó a buscar trabajo para llevar algo de dinero a su familia. Quería seguir estudiando, pero la economía de sus padres no se lo permitía, sobre todo, después de que en noviembre de 2013, el tifón Haiyan se lo arrebatara prácticamente todo. El ciclón, conocido como Yolanda en Filipinas, está considerado el más devastador de la historia del país, causante de más de 6.000 muertos y la ruina de más de un millón de viviendas, entre ellas, la casa de la familia Nadate, en Dit-Ana, una aldea al oeste del país.

En la familia de Shanderlyn todos los miembros sobrevivieron al desastre, pero se vieron gravemente afectados: la vivienda quedó arruinada, así como los cultivos de la aldea.

Cuando se cumplen dos años de aquel desastre, la vida de la familia Nadate ha cambiado por completo, gracias al programa de Recuperación Temprana que Cruz Roja Filipinas ha llevado a cabo en la provincia de Aklan, con el apoyo de Cruz Roja Española y Cruz Roja Canadiense. Una nueva casa de bambú y madera, resistente y con fuertes cimientos de hormigón se levanta junto a la que era su antigua vivienda, que la familia ha convertido en una tienda “sari-sari”, una especie de kiosko que también ha sido posible gracias a una subvención de 10.000 pesos filipinos de Cruz Roja.

Este año, esta ayuda se ha completado con una beca que ha recibido Shanderlyn para realizar un curso oficial de formación profesional, con el que además de un título oficial, hará prácticas en una empresa. Desde hace un mes, ejerce de camarera y recepcionista en un elegante hotel de Boracay, la isla más turística de Filipinas. “Creo que tengo ya capacidad para trabajar, después de la formación y las practicas”, asegura Shanderlyn. “Esta formación es mi oportunidad de encontrar un trabajo diferente y mejor; Mi familia no podría haber asumido los gastos”.

Como ella, otros 56 jóvenes de Aklan han participado en este programa, conocido como STED (Formación en Capacidades y Desarrollo de Empresas, en sus siglas en inglés) formándose en soldadura, preparación de alimentos, servicio de hoteles y restaurantes, limpieza de establecimientos, peluquería, mantenimiento de aires acondicionados, electrónica, mecánica, y costura.

Violeta Castro: Beneficiaria de Medios de Vida de Cruz Roja en Aklan.

Violeta Castro se dedica a la agricultura desde hace seis años. En noviembre de 2013, el tifón Haiyan o Yolanda, arrasó con sus campos de arroz. Gracias a Cruz Roja, ha podido recuperar la producción arroz, y ha recibido semillas para que diversifique sus cultivos, fomentando asÌ su resiliencia. Esta es su historia.

Arlene: Una vida a prueba de tempestades.

Para llegar a la casa que construye Arlene, con apoyo de Cruz Roja Española, es necesario andar medio kilómetro a pie, cruzar un río en balsa de bambú, atravesar varios campos de arroz, subir empinados y resbaladizos caminos, hasta alcanzar lo más alto de una ladera.

Aklan: Reconstrucción de un puente.

Las personas de la comunidad participan activamente en la reconstrucción del puente.

Programa de Rendición de Cuentas.

Para asegurarnos que las mujeres, hombres, niñas y niños afectados estén implicados en la planificación e implementación de la ayuda, se les pide que evalúen y juzguen nuestra intervención.

Estos aspectos repercuten en que el proyecto tenga el impacto deseado por los beneficiarios.

• TRANSPARENCIA
• PARTICIPACIÓN
• MECANISMOS DE QUEJA Y SUGERENCIAS