Pedro Pajares Arias, voluntario del Población Reclusa.

Soy voluntario y formador de otros voluntarios/as desde hace unos 10 años en los programas de atención a reclusos. Imparto un taller de atletismo. Durante este tiempo he vivido maravillosas experiencias protagonizadas por los propios internos e internas, que humanamente me han enseñado que son personas, con sus errores, pero personas. Recuerdo especialmente el caso de un chico conflictivo, que cuando comenzó a asistir a mi taller, los funcionarios me avisaron que tuviera mucho cuidado con él. Decidí ofrecerle una oportunidad y a medida que iban pasando los días fuimos tomando confianza y cuando se acercaba su día de libertad, se fue preparando para ello, salió y comenzó a buscar trabajo, con bastantes dificultades, hasta que encontró su trabajo definitivo. Actualmente, tiene su casa, su pareja, su trabajo y suma en la sociedad. Todo gracias a esa segunda oportunidad, cuya importancia hemos querido reflejar con este vídeo