Ya somos
 personas dando ejemplo

Estos niños y niñas son triplemente vulnerables. Porque son menores. Porque no pueden vivir con su familia. Porque tienen discapacidades. En esta residencia, Javi* y otros niños y niñas con necesidades especiales tienen su hogar. Aquí conviven como hermanos. Se quieren, se cuidan y aprenden a superarse.

Y si estos niños y niñas son como hermanos, Reme es la mamá de todos ellos. La directora de esta Residencia de menores con discapacidad de Cruz Roja ha logrado hacer de este espacio un verdadero hogar: “intentamos que lleven una vida lo más normal posible. Van al cole –la mayoría a educación especial-, y tienen actividades fijas por la tarde. Para ellos, la rutina es muy aconsejable”.

Jugar al fútbol con otros niños y niñas del barrio es una de esas actividades. Así desarrollan habilidades sociales y se integran en la comunidad. Porque son menores excluidos de todos los sitios, incluso de su propia familia; cargan con tremendas biografías que pueden marcarles para siempre. Como la de Javi, que llegó con 8 años sin saber ni hablar ni andar ni dormir en una cama, porque su familia lo tenía encerrado con los animales.

Pero Reme sabe que para avanzar y superarse, estos niños y niñas no pueden anclarse en el rencor. Por eso, cada uno elabora aquí su “Libro de vida”: reconstruyen su historia, con fotos, dibujos… “Nosotros los estimulamos a recordar lo positivo de su familia; y también trabajamos con ella –explica Reme-. Además, fomentamos los vínculos afectivos entre nuestros niños y niñas, porque solo así son efectivos los programas de enseñanza”.

“Calidad más calidez” es su metodología. La que ha logrado que Javi pueda llegar a andar, comunicarse y comer solo. La que consigue que estos niños y niñas se sientan útiles cuando cuidan a un compañero más vulnerable que ellos. La que provoca que algunos de ellos, al salir del centro a los 18 años, vuelvan como voluntarios, para ayudar y seguir aportando cariño a este hogar.

“Ellos me enseñan cada día –afirma Reme- que el ser humano siempre puede mejorar y superarse. Que puede llegar mucha más allá de donde imagina.” Sobre todo si hay apoyo y amor, añado yo, después de conocerlos.

*He cambiado los nombres que aparecen en el artículo para respetar la privacidad de las personas.