Sensibilización y formación sobre el entorno natural. Eso es una parte de lo que reciben y valoran los voluntarios y voluntarias que participan en campañas de Cruz Roja como “Moviéndonos por el Agua” o “Moviéndonos por el Río”. Pero lo que les entusiasma sin reservas es que esos conocimientos los pueden pasar a la acción. Silvia Knott, voluntaria medioambiental y encargada de promover desde Cruz Roja Madrid todas aquellas iniciativas que puedan desarrollarse con pocos medios y mucho apoyo voluntario, da fe de ello. Medir la calidad de las aguas en Arganda, Aranjuez o El Escorial; limpiar los ríos de la zona de la Pedriza; colaborar con personas mayores de Colmenar Viejo en labores medioambientales… No hay propuesta que no tenga un numeroso grupo de voluntarios dispuesto a todo. Para ella, la gran capacidad que tiene Cruz Roja de movilizar a mucha gente distinta por un mismo fin es un gran potencial a explotar por la Entidad en el reto medioambiental. Y también está la acción, claro, la clave del éxito de estos proyectos: “-Se implican mucho y piden más, más intervención, más acción de campo, más-”.