Imagen de inundaciones provocadas por el paso de un huracán en Gonaïves, Haití.
El pasado 1 de junio se inició oficialmente la temporada de huracanes en el Atlántico, que finalizará el 30 de noviembre, y ya se han aproximado algunas tormentas a Centroamérica y México con riesgo de convertirse en tormenta tropical o huracán.
Para la temporada de huracanes 2011, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) pronosticó el pasado 19 de mayo, una temporada por encima de lo normal con un 70% de probabilidades de tener entre 12 y 18 tormentas con nombre, de 6 a 10 huracanes y de 3 a 6 huracanes mayores (de categoría 3, 4 o 5 en la escala de Saffir-Simpson).
"En esta temporada, Haití cobra especial atención, ya que apenas se está recuperando de los efectos del terremoto de 2010; pero no sólo este país es objeto de nuestra atención. Toda la región, en particular el Caribe y la costa occidental de América Central, se ve afectada cíclicamente por tormentas tropicales y huracanes que devastan con regularidad las comunidades costeras y con frecuencia producen deslizamientos de tierra e inundaciones", señala Iñigo Vila, coordinador de emergencias de Cruz Roja Española.
"Hemos estado apoyando la puesta a punto de los planes de contingencia de las Sociedades de la Cruz Roja en la región, ya que se ha demostrado que la preparación para desastres a nivel comunitario es una herramienta fundamental para salvar vidas. Disponer de planes de evacuación y ubicar estratégicamente suministros de emergencia son acciones claves para minimizar los efectos de los desastres", concluye Vila.
Para hacer frente a esta temporada de huracanes, Cruz Roja Española dispone ya de delegados en República Dominicana, Haití, Guatemala, Honduras, Nicaragua, El Salvador y Panamá. Concretamente en Panamá, los delegados, especializados en manejo de desastres, trabajan con la Unidad Panamericana de Respuesta a Desastres (PADRU, por sus siglas en inglés) de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (Federación Internacional), basada en este país.
Así mismo, la Institución cuenta en España con tres centros logísticos, situados en Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid, con capacidad para asistir a 6.500 familias con materiales de emergencia, que podrían ser enviados en menos de 24 horas ante un eventual desastre. A ellos hay que añadir el centro logístico de Canarias, que forma parte de la estructura global de la Federación Internacional en el mundo.
Los voluntarios de Cruz Roja en los países del Caribe y América Central, muchas veces también afectados directos, son los primeros en responder a los desastres.
La frecuencia, la gravedad y los efectos de los desastres naturales están aumentando como consecuencia de factores como el cambio climático, la urbanización no planificada en gran escala, la pobreza y la desigualdad, y la degradación medioambiental.
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